
A veces los ojos no pueden detenerse en un punto, se van con el paisaje. En el cuerpo cosquillea una sensación que paraliza. El instante de lo maravilloso. Sí, ese mismo tempo de lo "sin tiempo".
Hay lugares que viven sin tiempo. Como en los relatos. Y por esa razón será que me atraen desde que era pequeña. Esta foto es de un viaje a Yavi Chico, la Puna Jujeña. Ahí se ve el museo, que hace unos días se inauguró oficialmente. Estoy esperando noticias frescas...